Que sean comunes o raras, las enfermedades infecciosas pueden afectar a  su empresa, fuerza laboral y al personal a su cargo. Con el brote reciente del   COVID-19 (comúnmente conocido como “coronavirus”) la inquietud por la propagación de  enfermedades infecciosas en el lugar de trabajo se intensifica cada vez más.
   El presente artículo ofrece a los gerentes una breve descripción de las  mejores prácticas en materia de comunicación y de gestión de las inquietudes de  los empleados, independientemente de la naturaleza de la enfermedad infecciosa.
    ¿Qué es una enfermedad  infecciosa?
    Las enfermedades infecciosas son enfermedades causadas por gérmenes  (tales como virus, bacterias u hongos) que pueden enfermar a una persona si  entran a su cuerpo y se multiplican. Si  bien no todas las enfermedades se transmiten de persona a persona, las hay que  se clasifican como contagiosas (o “transmisibles”). Estas  pueden transmitirse cuando una persona infectada tose o estornuda o tiene  contacto con sangre o fluidos sexuales de otra persona, o cuando una persona  toca un objeto que ha usado una persona infectada, como el pomo de la puerta o  el mouse de la computadora.
    Algunas enfermedades infecciosas pueden transmitirse a las personas por  insectos o animales, pero no pueden transmitirse de persona a persona. Sin emabrgo, los temores en torno a las enfermedades  infecciosas a veces surgen de la falsa impresión de que las personas pueden “coger”  enfermedades que no son contagiosas.
    Mejores prácticas para  gerentes
    Comparta información precisa y actualizada.  Si una  enfermedad infecciosa siembra inquietud en su medio de trabajo, la primera  medida a adoptar para mitigar la ansiedad consiste en compartir información  precisa sobre la enfermedad.
    Tranquilice a las personas y ayúdeles a mantenerse concentrados.
    Indique claramente que su organización toma la  salud y la seguridad muy en serio y que adoptará las medidas adecuadas para  proteger a los empleados. Si sus  empleados suelen viajar a países donde una infección generalizada ha sido  señalada, tenga en cuenta las actualizaciones del Departamento de Estado, los  Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y la Organización  Mundial de la Salud.
    Describa las medidas que su organización está adoptando para proteger a  los empleados, a los clientes y al público.
    Si un foco infeccioso aparece en su comunidad, brinde información a su  equipo sobre cómo su organización y departamento cuentan asegurar el buen  funcionamiento de la empresa. Explique las políticas de recursos humanos vigentes, el tipo de licencia  médica y opciones de trabajo flexibles que existen, y qué pago y beneficios  estarán disponibles. Intente establecer procedimientos que permitan que  las tareas clave se deleguen a terceros o se realicen de forma remota en caso  de que las personas se enfermen.
    Ayude a las personas a mantenerse concentradas en su trabajo y a  respetar sus actividades de rutina.
    Anime a los empleados que muestran signos de estrés o ansiedad a  dirigirse a su programa de ayuda. El programa facilita apoyo y recursos sobre muchos problemas relacionados  con la vida personal y laboral.
    Qué hacer si un empleado  tiene preocupaciones relacionadas con enfermedades infecciosas
    Si a uno de los miembros de su equipo le preocupa haber estado expuesto  a una enfermedad infecciosa, hable con su departamento de recursos humanos  sobre cuestiones como:
  
    - cómo proteger la vida privada de un empleado que tiene o ha tenido una enfermedad infecciosa si otros preguntan sobre la enfermedad;
 
    - la disponibilidad de opciones de licencia o regímenes flexibles de trabajo para quienes hayan tenido o estado expuestos a una enfermedad infecciosa;
 
    - qué hacer cuando un empleado puede volver al trabajo tras haber contraído una enfermedad infecciosa o viajado a un país donde pudo haber estado expuesto a una enfermedad infecciosa;
 
    - cómo evitar discriminar a alguien que tiene o ha tenido una enfermedad infecciosa y evitar todo trato potencialmente injusto;
 
    - qué hacer si alguien se niega a presentarse al trabajo por temor de contraer una enfermedad altamente contagiosa. La negativa del empleado puede estar protegida por las leyes estatales o federales.
 
  
  Mantener una buena comunicación con los  empleados, recursos humanos y altos dirigentes es un factor determinante para  favorecer la calma, la concentración y la productividad en su equipo cuando las  enfermedades infecciosas despiertan inquietud y temor. Dado que muchas de estas  enfermedades rara vez, si es que alguna vez, son contagiosas, un poco de  tranquilidad y una información precisa pueden ayudar mucho a todos a examinar  la situación bajo un punto de vista objetivo.