Vivir con trastorno bipolar
Ya sea que se trate de decepción por un trabajo perdido o la emoción acerca de una nueva relación, los cambios de humor son una parte natural de la vida. Si bien es cierto hay altos y bajos, finalmente la mayoría de la gente siente una sensación de control sobre las corrientes emocionales de la vida. Pero, ¿qué pasa si su experiencia es diferente? ¿Qué pasa si usted o un ser querido lucha por lograr este control o es completamente ajeno a la extrema intensidad de cambios de humor graves? Para las personas diagnosticadas con trastorno bipolar, esta imprevisibilidad emocional puede causar estragos en su trabajo o vida en el hogar y en sus relaciones.
Un diagnóstico de trastorno bipolar puede interrumpir las vidas tanto de la persona afectada por la condición y la familia cercana y amigos, especialmente debido a que el estigma de la enfermedad mental sigue siendo una realidad desafortunada de nuestra sociedad. Sin embargo, los tiempos están cambiando y, aunque puede no ser una situación ideal, un diagnóstico definitivo puede asegurar que la persona afectada por el trastorno bipolar obtenga la ayuda y el apoyo necesarios para hacer superarlo.
Comprender los signos y síntomas
Para las personas que padecen de esta enfermedad, los estados de ánimo cambiantes ocurren a menudo e intensamente y pueden no ser ocasionados por cambios en situación o por el impacto de los acontecimientos en sus vidas. En cambio, sufren graves episodios de depresión seguida de intensos aumentos de energía, conocidos como manías. La falta de control sobre estos estados de ánimo pueden complicar aun más la situación al causar una angustia intensa.
Los síntomas de manía incluyen los siguientes:
- Sentimientos de euforia, optimismo extremo, autoestima exagerada
- Habla rápido, pensamientos acelerados
- Disminución de la necesidad de dormir
- Irritabilidad extrema
- Comportamiento impulsivo y potencialmente imprudente
Los signos de la fase de depresión del trastorno bipolar incluyen los siguientes:
- Sentirse inútil, desamparado o sin esperanza
- Dormir o comer más o menos de lo habitual
- Problemas para concentrarse o tomar decisiones
- Pérdida de interés en actividades que antes disfrutaban
- Disminución de la libido
- Evitar a otras personas
- Sentimientos abrumadores de tristeza o pena
- Sentirse injustificadamente culpable
- Pérdida de energía, sentirse muy cansado
- Pensamientos de muerte o suicidio
Si usted está experimentando síntomas similares, comuníquese con su médico o un profesional de salud mental de inmediato para el diagnóstico y las opciones de tratamiento.
Tratar con el diagnóstico
El conocimiento realmente es poder, y ahora que usted tiene su diagnóstico, puede tomar medidas para hacer que su vida sea más feliz y saludable. Estos son algunos pasos importantes para vivir con el trastorno bipolar.
Continúe su tratamiento. Su equipo médico trabajará con usted para crear un plan de acción que le ayudará a manejar la condición de la manera más eficaz posible. Un plan de tratamiento integral generalmente incluye medicamentos, para ayudar a estabilizar su estado de ánimo, psicoterapia, educación y un estilo de vida saludable. Una vez estabilizados, muchos enfermos son tentados a dejar de tomar sus medicamentos, creyendo equivocadamente que ya no los necesitan. Si tiene alguna pregunta o preocupación sobre el plan de tratamiento recomendado por su médico u otros profesionales de la salud mental que coordinen su tratamiento, le recomendamos encarecidamente que hable con ellos directamente. Seguir con su plan de tratamiento, uno que usted y su médico ha trabajado y en el cual ha colaborado continuamente, es la mejor manera de mantener los síntomas en jaque.
Informe a su familia. Cuando es diagnosticado, puede sentir culpa o vergüenza, pero educar a su familia y amigos sobre el trastorno bipolar, puede ayudar a eliminar el estigma asociado a esta enfermedad. Debido a que los síntomas del trastorno bipolar pueden afectar negativamente las relaciones, sea abierto y honesto con sus seres queridos acerca de su condición y síntomas, sus opciones de tratamiento y cómo pueden ayudarlo en el camino hacia la recuperación.
Actúe como su propio defensor. Aprenda todo lo que pueda sobre el trastorno bipolar. Conozca los síntomas para poder detectarlos cuando surgen y compartirlo con su médico. Hable con su médico sobre todas las opciones de tratamiento disponibles y asegúrese de hacer cualquier pregunta que tenga.
Haga un seguimiento a los factores desencadenantes. Tenga en cuenta qué sentimientos o circunstancias vienen antes de un estado de ánimo maníaco o depresivo. Ser capaz de identificar los factores desencadenantes puede ayudar a evitarlos o manejarlos mejor cuando estos suceden.